"Al acabar una
conversación, siempre escribo "chao", porque en italiano
la palabra "ciao" significa 'hola', y no es un adiós. Pero hazme caso que si algún día te escribo adiós,
será definitivo."
Eres el mismo error que se
repite constante,
mi infierno sostenido
invisible y delirante.
Que sin querer o queriendo,
acabo siempre cometiendo.
Y es que nunca aprendo y
siempre juego a hacerme daño.
Das una de cal y otra de
arena, y pretendes que te haga caso.
Pero si tú tienes tus ases,
yo tengo mis años,
años de
experiencias, victorias y fracasos.
Pero observo y luego pienso,
yo soy la ventajosa.
No me cuesta olvidarte, ni
borrarte de mi historia.
Piensas que te extrañaré y
nada más lejos de la realidad.
Esto lo he hecho mil veces,
una más me da igual.
Te digo lo mismo que a todos
los que se fueron,
y que no
lo dijeron,
por compromiso o miedo
.
Un adiós para mí es algo
sincero.
Me pierdes, y al final serás
tú el que me eche de menos.
O quizás no, me da igual lo
que hagas.
Porque hoy me valoro y digo
"ya basta".
No soy tu juguetito de
transición si es lo que hacías.
Si no sabes lo que quieres
no es culpa mía.
No voy detrás de alguien a
quien no le importo
Estoy harta de tratar de
juntar tus trozos rotos.
Espero que cumplas con tus
verdades
Si algún día piensas en
mí... ¡felicidades!
Pero entonces será tarde.
Es duro cuando alguien se
aleja
Pero yo sé que a ti esto ni
te afecta
Aprendí a irme con quien le
intereso
Y desaparecer cuando sobro o
molesto.
Lo supe siempre desde aquel
veintidós.
Que nuestro destino era
decirnos...
Adiós.
No hay comentarios:
Publicar un comentario